La muerte de jóvenes a causa de la represión policial es ocasión de profundo dolor para sus familias y para todos los peruanos. Nos unimos en oración por ellos y le pedimos al Señor de la vida que proporcione consuelo a sus familiares, en medio de estas circunstancias de sufrimiento.

Los Jesuitas del Perú tenemos como una de nuestras misiones más preciadas acompañar la búsqueda de sentido de los jóvenes. Por ello, estas muertes como consecuencia del abuso de la fuerza por parte del Estado, nos moviliza a exigir que quienes ejercen el poder político detengan de manera inmediata el uso sistemático y desproporcionado de la violencia contra la ciudadanía que ejerce su legítimo derecho a la protesta. Más aún, cuando lo que mueve a los jóvenes que salen a las calles es un genuino deseo de vivir en un país justo y democrático.

Invocamos, asimismo, a todas las autoridades políticas a encontrar una salida a esta crisis institucional, dejando de lado ambiciones particulares para poner por delante el bien del país, encarnado en el respeto escrupuloso del orden constitucional.

Que la Virgen Inmaculada nos acompañe y que el Señor bendiga a nuestro país.

P. Víctor Hugo Miranda, SJ
Superior Provincial

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